Apasionaté por Dios
¿Hablamos con Dios?, ¿le seguimos en verdad?, ¿Buscamos con
pasión su presencia?, Muchos de nosotros
lo hemos intentado, pero al pasar el tiempo hemos desistido, buscar a Dios y
seguirlo no es algo sencillo. Es un llamado para personas que realmente sienten pasión por Él. La pasión es lo único que podría movernos con tal fuerza y persistencia que no nos hará
desistir.
Es importante que en nuestro interior nos determinemos a buscar a Dios. Lo más
importante en nuestras vidas es hacer la voluntad del padre. Muchas veces
olvidamos que no es suficiente con creer en Dios, eso no nos hace diferentes.
Lo que nos hace diferentes es perseguir con pasión la voluntad de Dios.
En Santiago 2: 19, vemos que Dios no necesita creyentes, el necesita
seguidores de su voluntad. Los caminos de Dios no siempre son como nosotros
creemos, lo mejor que podemos hacer es escuchar
su voz y hacer lo que Él desea, ahora la pregunta es ¿cómo saber qué es lo que
él desea?. Veamos qué es lo que dice la biblia acerca de esto.
Juan 10:27
Mis ovejas oyen mi
voz, y yo las conozco, y me siguen,
Reina-Valera 1960
(RVR1960)
Dios busca personas apasionadas por Él. Dios no ve tu
posición social, o no ve tu nivel de estudio, y con esto no digo que sea malo
estudiar, me refieroo a que Él ve la disposición que tengamos para escucharlo, para seguirlo,
para hacer su voluntad. Lo importante es que si continuamente oramos y
agradecemos a Dios. Aun en medio de cada circunstancia, si le pedimos a Dios
continuamente que anhelamos hacer su voluntad, que deseamos estar donde el
desea que estemos, Él va a contestar. (Lucas 11: 9-13).
Piensa en la persona con la que más te comunicas por teléfono,
y hablo de llamadas telefónicas no de textos, pues veras si esa persona te llama,
estoy segura que tú reconocerás su voz con la primera palabra que pronuncie. Si
nos comunicamos con Dios continuamente sabremos cuando es Él quien habla a
nuestro corazón y que es lo que Él desea de nosotros.
Algo muy importante que debes tomar en cuenta es que Dios se
mueve en una sola dirección, Él nunca va a pedirte algo que vaya en contra de
lo que lees en la biblia, tampoco va a pedirte algo que vaya en contra de los frutos
del Espíritu Santo (Gálatas 5:22-23). Al finalizar este pasaje dice algo a lo que
no siempre le ponemos atención y es “contra tales cosas no hay ley”. No hay ley
que te prohíba ser paciente, tener fe en tu corazón, estar gozoso y tener paz.
3 Juan 3: 2-3
Amado, yo deseo que tu seas prosperado en todas las cosas, y que tengas
salud, así como prospera tu alma. Pues mucho me regocije cuando vinieron los
hermanos y dieron testimonio de tu verdad, de cómo andas en la verdad…
VRV 1960
Dios anhela que vivamos una vida feliz y de abundancia total
y con esto no me refiero solo a la parte
económica. Si vemos en el versículo 3, habla acerca de su testimonio y su
trabajo, el apóstol en realidad al decir “prosperando” se refiere a su caminar
como seguidor de Cristo. Últimamente escuchamos la palabra prosperar y lo
primero que se viene a nuestra mente es nuestra economía, pero creo que aun que
esto es importante, estoy segura que Dios desea prosperar otras áreas de
nuestra vida aun con más urgencia.
Busquemos a Dios con pasión, hagamos su voluntad, aprendamos
cada día más de Él, que cuando las personas nos vean diga, "Él ha prosperado en Dios, si lo
escuchan hablar pareciera que no es el mismo", leamos la biblia, (Oseas 4:6). Eduquémonos,
leamos la biblia, compra un libro con devocionales, ahora hay muchísimas
herramientas que podemos utilizar, pero es importante que leamos, si tu lees no
vas a creer cualquier cosa que te digan sobre si es o no es, si tu lees vas a
tener respaldo (¡Examina todo! 1 Tes 5:21). No te digo que juzgues la
predica o que vayas a contradecir a la persona que te enseña, pero lo que sí es
seguro es que si te dicen que algo está en la biblia y tú sabes que no está,
simplemente debes desechar eso, y tomarlo de buena actitud.
Por último y no por eso menos importante el Espíritu Santo
hace siempre un buen trabajo (Juan 14:26) Él siempre está ahí ayudándonos y recordándonos
cada cosa que leemos o aprendemos en el momento correcto, porque déjame
decirte, los problemas van a llegar, las circunstancias adversas van a llegar,
pero si tu estas plantado, en una buena relación con Dios, lees la biblia y te
dejas guiar por la voz de Dios, estoy segura que las circunstancias no te moverán.
(Salmos 1: 1-3)
Persigamos su voluntad con pasión, busquemos incansablemente
su presencia, y sin que te des cuenta vas a empezar a cambiar tú, y vas a ver
tu realidad con otros ojos, con más esperanza, con más fe y sobre todo con más
amor.
Comentarios